LA HISTORIA DE LA CRUZ DE ETXALEKU
Etxaleku es una localidad Navarra y concejo de la Comunidad Foral de Navarra perteneciente al municipio de Imotz. Así, Etxaleku se ubica en un paraje natural muy conocido y visitado. Pagadiandieta es el monte más destacable al Norte de Etxaleku, haciendo frontera con Ihaben. Los montes Lausti y Aizkorre limitan con Oskotz y Gartzaron y al Sur nos encontramos con Amezti, Mendikur y Korosti.
Entre la historia del pueblo, destaca la conocida historia de “la cruz de los maquis” que se ha ido contando y transmitiendo de generación en generación. Esta historia cuenta que allá sobre 1944, en la zona del monte Amezti, fueron enterrados varios guerrilleros opositores al régimen franquista establecido en España tras la Guerra Civil, conocidos popularmente como maquis. Como bien es conocido, la lucha de los maquis comenzó desde el monte, lugar al que tuvieron que huir sus integrantes para seguir con vida.
La historia transmitida de generación en generación entre los vecinos de Etxaleku cuenta que en la zona de Amezti fueron enterrados 3 maquis y en su honor se hizo una señal en un árbol en forma de cruz.
Este árbol ha sobrevivido a lo largo de los años, pero el tiempo ha hecho que poco a poco se haya ido secando y pudriendo a pesar de seguir en pie.
Hace unos años, desde la Sociedad de Ciencias Arazandi se organizó una excavación para poder encontrar los cuerpos de los protagonistas de la historia conocida como “la cruz de los maquis” y realizar la exhumación correspondiente. Tras dicha búsqueda, el árbol quedó tirado y se procedió a recuperar la parte de la cruz, poniéndola de pie para poder seguir conmemorando la antedicha historia. Durante este tiempo, el árbol de la cruz ha sufrido considerablemente, encontrándose en un estado de putrefacción, y peligrando la conservación de “la cruz de los maquis”.
Debido a esta situación, el Concejo de Etxaleku decide, ante la preocupación de sus vecinos por la pérdida de esta parte de la historia y patrimonio histórico del pueblo, recuperar el trozo del árbol del monte y realizar un escáner en 3D de la cruz para hacer una reproducción en bronce. Una vez realizada, se devuelve el trozo de árbol al monte Amezti puesto que es su lugar y es donde debe preservarse la historia.
Proceso de recuperación
De esta forma, el Concejo de Etxaleku ha podido conservar esta pieza que es parte de su historia conmemorando a todas aquellas personas que perdieron la vida en el movimiento guerrillero antifranquista.
Además, invita a que toda persona que tenga interés, a visitar esta parte de la historia que queda ubicada en el monte Amezti y anima también a reflexionar entorno al respeto de los derechos humanos mediante la transmisión y difusión de esta parte de la historia del pueblo.